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Esta foto no es moco de pavo, que es difícil moverse y el conejito que está relajado no se incorpore.
Pero es que encima, mira como se tumbó la bolita de arroz esta: custodiando su plato xDDDD
Me parto con ella. Es adorablísima.
Hoy domigno he quedado con Pablo para desayunar, y ya que el 26 fue su cumple.
Queríamos desayunar en Lolita Bakery, pero estaba cerrado, y hemos ido a caminar hasta que encontrásemos un sitio.
De camino, hemos alucinado con esta yaya atómica y su abrigo de lentejuelas que deslumbraban en mil colores con la luz mañanera.
Tch!... lástima que en la foto no se aprecia.
Hemos visto a unas muñecas desayunando galletas más grandes que ellas.
Y, finalmente, hemos encontrado un sitio perdido en una callejuela, y hemos entrado a desayunar café con leche, brownie y sacher (¿se escribe así?) Y para que fuera más cumpleaños, he llevado conmigo una velita y un mechero, y la he plantado en el brownie, y le he cantado "cumpleaños feliz" bajito.
^_^ Le ha gustado, aue mono.
Pablo dice: "el de la vergüenza"
Ha invitado él :3 Cuantas le debo ya... u.u pobre.
El grifo del baño me ha fascinado. Cuanto tiempo sin ver un grifo tán rústico.
Era digno de fotografiar.
En la calle, hemos encontrado el Matrimonio Arnolfini a piezas de papel. Como el que pega un cartel de un concierto, pero a base de varios trozos.
La foto era obligada. Arte urbano al alcance de todos, todos.
Más arte urbano, sobre todo un edificio.
"Paaablooo, mírameeee" clic
(Que digno él con su abrigo tan estiloso... ¡Como molas!)
El resto del día lo he pasado en casa, limpiando, recogiendo y cosiendo.
Lo que se dice una maruja bien hecha.
De momento... yo dejo aquí mamá.
Como siempre, se me cierran los ojos cuando hago las publicaciones
