Hoy es un día pésimo. Sólo tengo ganas de quedarme en casa llorando, en el sofá enrollada con la manta, y plantearme mi vida desde 0
No creo que nada de lo que he hecho y esté haciendo esté bien. Todo está mal. Lo veo todo mal. Pero lo peor, es que no sé que hacer para que esté bien.
Los trabajos en los que me emplean, no son lo que quiero. Los salarios que me ofrecen no me dan para llegar a fin de mes si no es con tu ayuda. Cuando intento pedir ayuda al estado, por H o por B se me anula.
¿Qué está tratando de decirme la vida? ¿Que lo hago mal? ¿Y qué hago?
Estoy CANSADA de vivir bajo las órdenes de otro. Un otro, que no me da la felicidad, y que me somete por una recompensa mínima. Que me hace vivir en inquietud, pendiente de cada palabra o movimiento que pueda hacer.
Estoy harta de ser una doña nadie, pero con mil sueños en la cabeza, que, con el paso del tiempo, se han ido viniendo abajo.Y que, además, la mayoría de ellos requieren dinero.
Ja! ¿Qué cosa no requiere dinero hoy en día?
Incluso una relación, necesita dinero. No será la base, pero sí un pilar importante.
Hoy he estado en el Brandery. He invitado a Carol, a la que, por cierto, me he olvidado fotografiar para poner en el blog.
Allí, en el evento, he recogido tarjetas y catálogos, de marcas que me gustaban, justificándome diciendo que tengo intención de abrir una tienda, y estaba recogiendo tarjetas y catálogos de todo aquel producto que se asemeja a lo que quiero. Y he llegado a creermelo de verdad. Pero, está claro, que quienes me atendían, tenían sus serias dudas.
Total: una doña nadie. Y con razón.
Y dentro de mi vergüenza (a pesar de que la mayoría de gente que por allí andaba, iba de gorroneo puro y duro. Yo sólo un poquito), me he topado con un pasillo donde había muestras de trabajos de las escuelas de moda de Barcelona. Entre ellas, por supuesto, estaba la de la Feli. Al verme, la chica que estaba para atender, me ha reconocido, y me ha preguntado que qué tal me iba. Por supuesto, le he dicho que fatal. Que no estaba haciendo nada, profesionalmente, para lo que había estudiado, aunque iba haciendo cosas por mi cuenta (cuando en realidad, poca cosa he hecho, la verdad).
Entonces, una ve el estilo que la Feli promociona, y entiende que nunca encajó, y que seguramente, vaya a seguir siendo así. Porque lo que yo hago, no encaja, eso desanima más a la hora de hacer cosas.
Mejor dicho, desanima a la hora de tener fe en lo que me gusta y/o quiero hacer.
Por Dios, son un montón de telas enrolladas alrededor del cuerpo de los maniquies.
Es que no le veo el encanto. ¿Es ese mi problema?
¿Qué voy a hacer con mi vida?
¿Qué debo hacer con mi vida?
De momento, me voy a poner el uniforme del trabajo, a comer alguna cosa rápida y barata, y a gastar un día más en mi vida.
Porque, mientras, el tiempo va pasando...
¿Tenía que haber estudiado ilustración?
Otro día, u otro momento, con más ánimo, te pondré lista y foto de las marcas que me han interesado en el Brandery.